Junio ya está aquí, y con él las escapadas exprés y las piscinas naturales

piscinas naturales

Junio, el pistoletazo de salida de las vacaciones de verano ¿recordáis aquellos años de estudiante cuando el verano duraba tres largos meses? Junio significaba el comienzo de un verano infinito y tu mayor preocupación era qué hacer con todo ese tiempo libre, aquellos años en los que no parabas quieto y te faltaban horas en el día ¿los recuerdas?. Qué tiempos ¿verdad?

Ahora parece que hemos sustituido esos largos meses de verano estudiantil por escapadas de fin de semana a lugares cercanos, casas rurales o viajes exprés en los que pasar más tiempo en el coche o en el avión que en la ciudad de destino. Pero al final, merece la pena. Porque estas escapadas siempre se cogen con más ganas y, a veces, hasta se disfrutan más que las largas semanas de vacaciones por su carácter efímero e intenso. Porque sí, todos estamos deseando olvidar la contraseña del ordenador de la oficina durante unas semanas, pero mientras llega ese momento, ¿por qué no disfrutar del verano, las horas de sol y los intensos fines de semana al máximo? Hagamos la espera más amena.

Con el objetivo de ofreceros una alternativa a los que echáis de menos el mar, los chiringuitos, las cervecitas después de un chapuzón o a los que tenéis el mar a escasos kilómetros (incluso metros) y os apetece hacer un plan diferente, hemos realizado una intensa labor de investigación para encontrar una alternativa a la altura de vuestras expectativas y creemos haberla encontrado: las piscinas naturales. Espacios mágicos que nos ofrecen una vía de escape de la rutina a escasos kilómetros de la ciudad. Allí puedes disfrutar del tan esperado primer baño del verano, practicar deportes acuáticos como buceo, vela o windsurf, hacer senderismo o simplemente ir a pasar el día a las cascadas con amigos y ver anochecer en el bar o chiringuito, disfrutando de una cerveza bien fría.

Si bien, además de las excepcionales playas que tenemos en España, nuestra geografía también nos ofrece pequeños rincones naturales como Gulpiyuri, una pequeña playa situada en Llanes; las Fuentes de Algar en Alicante, Montanejos, en la comarca del Alto Mijares en Castellón; La Fontcalda en Tarragona; el Salto del Usero en Murcia. También en las Islas podemos disfrutar de estos espacios únicos como El Charco Azul en la isla de El Hierro, Los Charcones en Lanzarote, o El Caletón en Tenerife.

Piscinas naturales
Foto: Vicencio Padovani

Según nos vamos adentrando en la península, el sonido del mar se va disipando y en tu mente comienza a sonar, inevitablemente, la banda sonora que acompaña al verano madrileño (y al de toda la zona centro) desde hace 30 años… ‘vaya, vaya, aquí no hay playa, vaya, vaya…’

Porque sí, aunque la mítica banda se refiriera a Madrid, este casi-himno se ha extendido a toda la zona centro y sí, es verdad, no hay playa, nos pongamos como nos pongamos. Pero la naturaleza es sabia y ha sabido recompensarnos con unas piscinas y termas naturales increíbles. En Madrid, por ejemplo, encontramos Las Presillas en Rascafría y el Pantano de San Juan. En Castilla La Mancha, a 80 km de Cuenca, están Las Chorreras, y entre las provincias de Albacete y Ciudad Real se encuentran las Lagunas de Ruidera. En Castilla y León, podemos escaparnos a las Arenas de San Pedro en Ávila, o al Lago de Sanabria en Zamora. Por último en Cáceres se encuentra una de las piscinas naturales más conocidas: La Garganta los Infiernos, situada en el Valle del Jerte.

Nosotros ya hemos planeado una ruta para conocer todos estos rincones y brindar por vosotros en cada uno de ellos con una cervecita mientras disfrutamos del sol y el paisaje, ¿os unís?

Nos vemos en los bares

Grifos de cerveza

Ya somos mayorcitos como para llorar la vuelta al cole. Los anuncios de uniformes en la televisión y las ofertas de material escolar no nos afectan tanto ahora como hace varios años. Sin embargo, lamentamos mucho más otros asuntos propios de la llegada del otoño.

El hecho que debemos asumir es que los días son más cortos. Así que, si os sorprendéis cualquier día mientras tomáis unas cañas de que hay una luz propia de Helsinki en noviembre, ¡no os asustéis! Es normal. Los días comienzan a ser cada vez más cortos y no podemos evitar este hecho.

Vuelta a la oficinaAdemás, empezamos a usar la querida “chaquetilla” que tanto hemos echado de menos este verano. A partir de ahora, esta prenda estará presente durante los próximos meses. La solución es clara y dejar de salir no es una opción. Durante estos días las terracitas comienzan a encender sus estufas de las calles, y las barras comienzan a llenarse de gente que no duda en seguir haciendo planes.
Pero el tema que más nos incomoda es, sin duda, la vuelta a la oficina y la pérdida de horas libres en las que cervecear. Pero amigos, no hay mal que por bien no venga. Así que coged a vuestros colegas y proponedles ir de afterwork o mejor, de Bartes. Que aunque este concepto esté ahora muy de moda, en España siempre hemos sido muy de reunirnos alrededor de unas cervezas, unas tapas y debatir los temas de la oficina.

Nosotros nos secamos las lágrimas mientras escribimos estás líneas pero, como solemos decir: nos vemos en los bares.

Planes para sobrellevar el fin del verano

Camping veraniego

Nos resistimos a la llegada de septiembre. El noveno mes del año sólo trae problemas: la vuelta al cole, el regreso a la oficina, los nuevos realities de televisión… todo dramas. Por eso, queremos olvidarnos que el verano tiene los días contados y preferimos vivir esta cuenta atrás como si estuviéramos en la primera semana de junio. Somos conscientes de que ya habéis ido a la playa, a las fiestas de vuestro querido pueblo y a un mínimo de dos festivales. Por eso, aquí os ofrecemos tres planes diferentes para que pases el final de agosto de una forma mucho más amena:

  • Surcar los siete mares. Todos de pequeños hemos jugado a ser piratas y, prácticamente todos, hemos tenido un disfraz de pirata. Así que por qué no serlo ahora. ¿Qué necesitamos? Una bandera pirata, un barco, tu grupo de amigos y ¡BOOM! Tenemos el viaje perfecto. Pero claro, tener un barco aparcado en casa no es fácil, por eso tenemos la solución: compartirlo. Hay varias webs (barcoamigo.com, boatbound.com o genteparanavegar.com, entre otras) donde compartir los gastos del viajes o incluso alquilar el barco entero para vosotros es posible. De todas formas, si el oleaje os parece demasiado “extremo”, sois más de relajaros en ríos y no os conformáis con viajar sólo por el territorio nacional, os presentamos a Leboat (leboat.es) donde podrás recorrer varios países a través de sus vías fluviales.
  • GampingOlvida el camping y descubre el gamping. Dormir en una tienda de campaña, hacer barbacoa y beber unas cervezas mientras disfrutas de la brisa veraniega es un plan al que al menos nosotros no sabemos decir que no. Pero, ¿qué hacéis cuando queréis ir a un lugar sin zona de camping? Aquí es cuando aparece Gamping (Gamping.es), una página web donde podemos elegir en qué jardín queremos pasar la noche. Sí, habéis leído bien: jardín. Y es que de ahí viene el nombre garden + camping. Es una novedosa forma de conocer nuevos lugares y personas de forma económica que por lo menos nosotros no nos queremos perder.
  • ¿Turismo, cerveza y deporte? Sí, queremos. Negarnos a que haremos este plan cuanto antes, es ridículo. Y es que encontrar una manera de recorrer una ciudad de forma más divertida es difícil. Este “bar móvil” se mueve con el esfuerzo grupal: pedaleando todos es la única forma de poder pasear por las calles de varias ciudades españolas como Madrid, Barcelona, Sevilla, Murcia o Málaga. Además, mientras conocemos la ciudad, disfrutaréis de una caña bien fría recién tirada. El resultado: una experiencia inolvidable.

Cuatro libros para meter en la maleta

En verano tenemos algo que echamos de menos el resto del año: vacaciones y tiempo libre. Por eso, es el momento de hacer todo lo que nos apetece y retomar aquello que tenemos pendiente como, por ejemplo, leer. Te proponemos que, estés en las playas del caribe o en Benidorm, te relajes en la hamaca del chiringuito más cercano, pidas una buena cerveza y devores los libros que tenías en la lista desde hace meses. Hoy te proponemos cuatro lecturas y cuatro cervezas para disfrutar en vacaciones.


La chica del trenLa chica del tren (Paula Hawkins) y una cerveza de trigo

Más de 44 millones de personas han descubierto la historia de Rachel, una chica que vive inmersa en una rutina que empieza todas las mañanas en el tren de las 8:04. Cada día imagina las vidas de los pasajeros que siempre la acompañan y que no conoce hasta descubrir que nada es como ella pensaba.

Para disfrutar de la novela de Paula Hawkins te recomendamos que pidas una cerveza de trigo con la fruta del verano: sandía o melón. Deja volar tu imaginación con la lectura y con el aroma a cereales de esta bebida que acabará con un final especiado largo, perfecta para este thriller.


Libro LolitoLolito (Ben Brooks) y una cerveza lager

Si este verano quieres divertirte te recomendamos la obra de  Ben Brooks, una comedia sobre un adolescente que comienza a vivir en sus propias carnes los problemas del mundo adulto.

La comedia marida a la perfección con la clásica lager, ligera y refrescante. La rubia de siempre acompañada de un buen libro como Lolito, hará que te acabes esta novela en lo que te dura una caña.


chap chapChap Chap (Kiko Amat) y una cerveza abadía

El novelista y periodista Kiko Amat nos ofrece esta antología profesional. Amat recopila algunos de sus mejores artículos con conocidos personajes como Juliette Lewis o Julio Iglesias, pero siempre manteniéndose como protagonista.
El ingenio de las crónicas se saboreará mejor con la cerveza de abadía  y si lo acompañas con unas piezas de manzana, mejor que mejor. Sus sabores afrutados, frescos y su toque acaramelado harán quieras que el momento de lectura dure para siempre.


El JilgueroEl jilguero (Donna Tartt) y una cerveza negra

Para el jilguero recomendamos una cerveza con cuerpo y cremosa. La negra stout es la variedad perfecta para acompañar a Theo Decker, un joven superviviente a un atentado en el Metropolitan de Nueva York que aprovecha el caos de este ataque para robar una obra del museo. Los aromas a café y regaliz de la cerveza harán que vivas más intensamente las aventuras del protagonista por Nueva York, Las Vegas y Amsterdam.

El cine ya no es lo que era. Es mejor.

Lo antiguo, si parece nuevo, dos veces bueno. Esa es la filosofía que siguen las nuevas tendencias para realmente, hacer lo de siempre. Ahora disfrutamos de la cerveza de afterwork y de las fotografías con filtros vintage. Sí, volver al pasado se ha convertido en el plan del presente y si no, pensemos en un par de planes para cualquier fin de semana de verano.

Hoy que podemos decidir entre salas en tres dimensiones, efectos increíbles, mejoras en la calidad de la reproducción y sillones que ya nos gustaría tener en casa… elegimos un clásico, los cines de verano.

Gente reunida en un espacio abierto por y para disfrutar de una película. Por supuesto, no todo el mundo va igual de provisto para este tipo de eventos; está el tipo que lleva la merienda o la cena, siempre lleno de bocadillos, patatas fritas y dulces para que a su grupo no le falte de nada; la señora que lleva cojines, lo que en principio parece ridículo, a los 20 minutos se convertirá en la más envidiada de toda la sesión; el que lleva una mantita, que aunque pasemos por la tercera ola de calor, él tiene la costumbre de taparse hasta arriba, y aunque lo intentéis nunca se quitará ese pedazo de felpa de encima.  Y por último, nuestro favorito,el que propone comprar unas cervezas frías para poderlas beber mientras disfrutan de la película.

La situación es idílica: 28 grados, ligera brisa veraniega, chanclas, rodeado de amigos, una buena historia y una cerveza para refrescarte en los momentos de mayor tensión de la trama. A su vez, todo es como una película americana de los 80. Así que todo se vuelve completamente nostálgico.

No podréis decir que no es un gran plan. Sin embargo, si sois de los que además del cine, adoráis ser estrellas de la canción en la intimidad, tenemos el plan perfecto. Al fin, ¡han llegado a España los cines-karaoke! Sesiones en las que ya no tienes que ocultar tus gallos tras un chorro de agua en la ducha, porque todos los asistentes hacen lo  mismo. Pensad en Grease o The Rocky Horror Picture Show. Ahora imaginad a una masa enloquecida gritando “tell me more, tell me more”, mientras sigue la película. Y nadie te critica. De hecho el personal coge su botellín de cerveza y lo usa como micrófono. Eso, amigos, es otro planazo de cine para estos días de calor que nos acompañan.

Nosotros hemos probado ambos planes y somos muy fans de ellos. Ahora os toca a vosotros, salid a la calle, poneos vuestras mejores galas y disfrutad del cine en todas sus posibilidades.

Ahora

El hit del verano: la jornada intensiva

¡Hola cerveceros! Estamos especialmente contentos y es que, aparte de que es viernes, la próxima semana muchos podréis disfrutar de la tan esperada jornada intensiva. El momento madrugón para entrar a las 8:00 de la mañana trabajar es duro pero, cuando te acuerdas de que a las 15:00 estarás apagando el ordenador la cosa cambia.

Tienes toda la tarde para hacer lo que más te apetezca, planes tan diversos como ir a la piscina, pasar más tiempo con tus hijos, echarte esas siestas de verano que tan bien sientan, comer en casa (esto parece muy simple pero seguro que agradecéis dejar el tupper en casa por un tiempo), ir al cine de verano con tus amigos, ir al gimnasio, arrasar en las rebajas… en fin, después de un año tan largo hay mil planes que se ocurrirán para disfrutar de los meses de verano pero a nosotros lo que de verdad nos gusta son esas cañas improvisadas que surgen con los compañeros de trabajo.

Este año se han puesto muy de moda los afterworks y desde Cervecear nos gustaría proponeros terrazas de España donde podréis disfrutar de vuestro afterwork particular.

  1. Para los que viváis en Madrid os aconsejamos “El Viajero” y, sobre todo, su azotea para disfrutar de sus vistas que tiene.
    El viajero
  2. En Barcelona nos hemos decantado por “Martinez”, no hacen falta palabras para describirlo.
    Martinez
  3. Os presentamos a “La más bonita” un espacio muy original en Valencia perfecto para tomar unas cañas acompañadas de los deliciosos platos que ofrecen.
    La más bonita
  4. Si tenéis cerca del trabajo el Hotel Doña María no dejéis de visitar su terraza y tomaros una cerveza contemplando la giralda.
    Doña María
  5. A todos los mañicos os recomendamos Libertad 6.8, un bar escondido pero con mucho encanto.
    Libertad
  6. En A Coruña tenemos Moom 57 para disfrutar de una cerveza a orillas del mar.
    Moom
  7. Y para terminar, no nos olvidamos de los canarios, en el Café La Ola también podréis disfrutar sintiendo la brisa del mar.
    La Ola

Sabemos que unos cuantos afortunados llevan con el cambio de horario desde mediados de junio así que, si ya habéis hecho algún afterwork no seáis tímidos y ¡recomendarnos las terrazas más populares de vuestra ciudad!

SIN RIDERS. COMIENZA LA GIRA

¿Aún no conoces a los SIN Riders? Son fieros, atrevidos, intrépidos, pero ante todo, concienciados. De hecho, moteros y responsables son sus dos principales calificativos. Y es que estos tipos duros son los encargados de transmitir un mensaje FUNDAMENTAL: En la carretera, cerveza SIN.

sinEsta crew motera no quiere dejar a nadie indiferente y se han propuesto un reto para este verano: recorrer el país demostrando que la carretera y el alcohol son incompatibles. Como buenos riders, aman y disfrutan del viaje, pero tienen algo claro, mientras ellos se encuentren sobre el asfalto, la SIN es la única alternativa posible.

Todos conocemos la teoría, pero para predicar con el ejemplo, van a invitar a una cerveza SIN a quienes estén en los bares de carretera que se encuentren a su paso. Como veis, estos tipos duros no son nada aburridos. Así que con este espíritu, comienzan una gira por todo el territorio nacional durante la cual harán unas concentraciones moteras especiales en cinco ciudades donde los asistentes podrán disfrutar de música en directo, tapas y, por supuesto, cerveza SIN.

Arrancan en Madrid el próximo 28 de junio. Así que no lo dudes ni un minuto más, descubre su web y regístrate en su evento más cercano, habrá muchas sorpresas.

En la web encontrarás toda la información y podrás registrarte para que tu moto y tú podáis asistir. Sí, amigos. Tu moto y tú.

Bienvenidos a los SIN Riders

¿Qué harías si te perdieras en una isla desierta?

Cervecear en una isla desierta

Pongámonos en situación:
Tú, todo aventurero te dispones a irte de viaje a Tailandia. Tienes todo organizado y el itinerario está más que cerrado para toda la semana. El macuto está a rebosar y ya no soltarás la cámara de fotos durante todo el día. Sin embargo, la barrera del idioma trastorna tu viaje más de lo debido…

Tras una primera toma de contacto visitando los palacios y templos de la capital llega el momento de alejarse de la bulliciosa ciudad. Vuestro siguiente destino está a unas dos horas de Bangkok. En la información que habías sacado previa al viaje, aparecían unas imágenes de una isla paradisiaca que te aseguraban ser la envidia de todos tus amigos a la vuelta. Tratáis de preguntar cuál es la mejor forma de llegar hasta allí a un lugareño y él, muy amablemente, se ofrece a llevaros en una pequeña barquita con la que habitualmente se gana la vida saliendo a pescar cada día.

Después de una hora de camino por agua turquesa, el simpático lugareño os hace gestos de que “habéis llegado a vuestro destino”. Exactamente, estáis ahí. Sin embargo, todo lo que a priori parecía ser como la isla de la película La Playa, en Kho Pi Pi, llena de lujos y comodidades resultó ser un diminuto espacio de arena rodeado de agua y palmeras. Bueno, vale, no suena mal pero… ¡S.O.S!, ¡No hay chiringuitos!, ¡Vacaciones sin cerveza! Y ahora ¿qué hacemos? O mejor dicho ¿qué harías tú? Te contamos hasta dónde seríamos capaces de llegar nosotros por poder disfrutar como es debido en una isla desierta y las posibles opciones que tendríamos:

a) Cogemos todas las ramas y maderas que encontramos por el palmeral y nos hacemos una pequeña barca para ir a la isla más cercana en donde sí hay chiringuito con cerveza.
b) Gritamos hasta quedarnos sin voz para que el lugareño vuelva a salvarnos de estar en una isla sin cerveza y por supuesto, que nos lleve a otra pero ¡con chiringuito!
c) Como soy todo un aventurero cervecero nunca faltan en mi macuto un par de cervezas y una latita de aceitunas para mi acompañante y para mí. Más vale ser previsor que estar de vacaciones sin cerveza y sin tapita.

¿Y tú recurrirías a alguna de nuestras decisiones in extremis o tienes alguna mejor?
Tú historia continúa porque te decimos la clase de cervecero que eres:

Si eliges la opción A:
-¡Chapó! Eres un cervecero de 10. Vaya donde vayas, sois dos en uno. Continúa por esa línea porque el esfuerzo en esta vida tiene recompensa y en este caso, la recompensa es muy fresquita…y bien merecida.

Si eliges la opción B:
-Te mereces un 5 raspado. No vas en mal camino pero estamos seguros que si quieres, puedes agudizar más el ingenio. Así que venga, que no se diga que por conseguir una cerveza fría tan sólo darías un par de grititos. ¡El lugareño podría no escuchaaaaaarte!

Si eliges la opción C:
-El cervecero previsor. Ordenado, precavido…así eres tú. Porque siempre hay hueco para meter un par de cervecitas al macuto por si acaso y tu compañero de viaje estará encantado de que tengas esa cabeza ordenada. Sin embargo, el cervecero de chiringuito auténtico sabe que no hay nada como tomarse una caña fresquita bien servida así que aunque nos gusta tu previsión, hay que seguir mejorando.

Septiembre ya está aquí, ¡una caña por favor!

Por ti, cerveza

¿Habéis notado que la ciudad empieza a tener vidilla por las calles? Tras las vacaciones, dejamos la sombrilla aparcada en primera línea de playa para el año que viene y llegamos a casa con un moreno espectacular y con el modo zen ON para entrar con una sonrisa y llenos de energía por la puerta de la oficina.

Si eres de los que andan tristones por la calle pensando que, después de deshacer la maleta, la alarma dejará de estar en silencio para sonar de nuevo a eso de las ocho de la mañana, saca pecho y vence al síndrome postvacacional. Porque con Septiembre llega de nuevo la jornada laboral, pero también miles de planes que te harán “amar” la vuelta a la oficina.

Aunque te resistas a volver, tenías unas ganas locas de juntarte de nuevo con todos tus compañeros de trabajo después de dos meses de vacaciones. Cuando uno seguía frente al ordenador, los otros estaban desconectando bajo el sol y viceversa. Ahora, por fin, podéis retomar el café de media mañana y la siempre divertida hora de la comida para poneros al día y hacer un remember de los momentazos y las fotos del verano. Y por supuesto, inaugurar la tarde C, de cañas, obligatoria al menos una vez por semana para mantener el buen rollo con el que has aterrizado.

Además, si das una vuelta por el barrio te darás cuenta del buen ambiente que se respira. Conciertos, nuevas películas y obras de teatro en la cartelera, talleres DIY, ofertas en gimnasios, inauguración de exposiciones y, lo mejor, el final del verano para tu camarero preferido. Tu segunda casa quita el cartel de “cerrado por vacaciones” y vuelve a abrir las puertas para darte la bienvenida. Así que ya estás tardando en escribir por WhatsApp a tu grupo de amigos y organizar una quedada para el reencuentro. Vuestro héroe hostelero también tiene ganas de volver a ver vuestras caras, abrazaros y serviros una ronda de cervezas tiradas con todo el amor del mundo. Todo un planazo si tienes en cuenta que el sol está de tu parte y sigue dando licencia para disfrutar de la terraza mientras escuchas a tus amigos contando sus nuevos proyectos.

Si todavía sigues dudando de las posibilidades que te ofrece Septiembre solo tienes que buscar tu plan y decidir el lugar, la hora y la compañía para disfrutar de la ciudad. Seguro que empiezas el curso con buen pie.

¿Cuál ha sido tu mejor momento cervecero del verano?

Recuerdos

El verano está terminando y de vuelta a casa todos hacemos el balance de cuánto hemos disfrutado durante los días de descanso. Que si la playa, que si la montaña, que si el pueblo familiar, que si viajecito al extranjero, que si no has salido de la ciudad pero te lo has pasado igual de bien…Pero, ¿te has parado a pensar con quién has disfrutado de ese momento cervecero inolvidable? ¿Con quién te has tomado ese cervecita que añorarás durante el invierno? La verdad es que el lugar, al fin y al cabo, es lo de menos, lo que más importa es con quién. Quizás ha sido con algún grupo de amigos, tu familia, un chico o chica especial que conociste por casualidad este verano… ¡Piénsalo! Seguro que ahora mismo te está saliendo una sonrisaca de oreja a oreja porque sabes a quién me refiero, ¿verdad?

Si, por el contrario, tienes este asunto pendiente, aun estás a tiempo. Decídete y propón a esa persona especial volver a quedar, las ciudades y pueblos están abarrotados de terrazas pensadas para que disfrutemos de una refrescante cerveza  con la mejor compañía. Si hay un dicho que merece la pena seguir repitiendo es el de «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”. Así que, ¡aplícate el cuento! y cervecea hoy por si no pudieras cervecear mañana.

Utiliza el WhatsApp, sí, pero sólo para ponerte en contacto con esa persona. ¿Qué mejor reencuentro que una tarde de cañas? Porque seamos sinceros,  parece que las conversaciones siempre fluyen mejor en una terraza, acompañando esas largas charlas, cotilleos, risas o arrumacos, con una cerveza bien fría y algo de picar.

CERVEZA (50)Si no se te ocurre con quién tener ese gran momento cervecero, te damos algunas pistas: ¿Hace cuando que no ves a tu amigo del colegio o a tus primos? A lo mejor te apetece recordar viejos tiempos con alguno de ellos, esos primeros amigos con los que tanto hemos jugado pero conforme nos vamos haciendo mayores vemos con menos frecuencia. ¿Conociste a alguien este verano pero la cosa no llegó a más? Ahí ya tienes la excusa perfecta para un buen reencuentro. También puedes proponérselo a tus padres o a tus abuelos y seguro que así pueden presumir de hijo (o nieto) durante varias semanas. ¿Por qué no?

Porque el momento cervecero no tiene límites ni barreras, ¡elige el tuyo!