Nueva estación, nuevos sabores

Sushi

Estamos en la recta final del verano, la lluvia de estos días y la ligera bajada de temperaturas nos avisan de que el otoño está llegando. Para nosotros eso no es excusa y queremos seguir proponiendo planes alternativos para todas las épocas del año, porque hay vida más allá de la típica peli de domingo con manta en el sofá.

Esta vez os animamos a probar sabores de otros países cuando salgáis por ahí a comer o cenar y, como sabemos que os gusta pediros una caña bien fría, os vamos a proponer un maridaje especial de platos internacionales con diferentes tipos de cerveza.

sushiJaponesa – Sushi
Es un plato a base de arroz cocido adobado con vinagre de arroz, azúcar, sal y otros ingredientes, incluyendo pescados o mariscos. Si lo tomas acompañado de wasabi le da un toque picante que va en perfecta armonía con una Lager Extra gracias a sus aromas y sabores marcados por el malteado tostado y recuerdos a lúpulo y lácteos.

Comida mexicanaMejicana – Mole Poblano
Consiste en una salsa de una gran variedad de ingredientes vertida sobre piezas de guajolote, nombre que se le da en México al pavo doméstico, aunque actualmente es común su uso con pollo u otras carnes, siendo uno de los platos más representativos de México. Al tratarse de un pato contundente con sabores intensos, lo mejor es acompañarlo de una cerveza de Trigo con aroma a cereales y sabores afrutados.

Comida chinaChina – Dim Sum
El dim sum es una comida china liviana que contiene combinaciones de carnes, vegetales, mariscos y frutas. Es perfecta para tomarla con una cerveza suave tipo Lager Especial dorada con reflejos ámbar. Aporta un agradable sabor a malta y buen equilibrio con los amargos del lúpulo.

Comida indiaIndia – Jalebi
El jalebi es un dulce de la cocina India. Es una mezcla de masa remojada en sirope (almíbar), con su particular forma azarosa de anillo o similar a un pretzel y de color naranja. Para postres o platos dulces la cerveza de Abadía marida muy bien gracias a su alta fermentación con aromas afrutados.
Estas son todas nuestras aportaciones, si se nos ha pasado alguna por alto ¡no dudes en compartirla!

Postureo cervecil

Hoy en día el que no presume de algo que no tiene es por qué no quiere. ¿Y presumir de algo que no sabemos? Pues también. Somos esclavos del postureo y lo llevamos a límites insospechados. A nosotros, aunque negaremos haber admitido esto, también nos afecta y sí, somos posturitas.
Y es que con el buen tiempo, los primeros rayos de sol, el hecho de sacar toda esa colección de ropa veraniega y las primeras cervecitas con amigos, nuestro esplendor en las redes sociales se hace más presente.

Es ahora cuando descubrimos cada día que algún amigo nos recuerda que dejes el abrigo en casa. De hecho, lo que en principio parece la tarea más simple del el mundo, se convierte en toda una batalla: elegir los hashtags correctos. #Sol, #sun, #solecito, #tiempazo, #sunny, #spring, #primavera, #aquisufriendo, … la lista parece no acabar nunca. Necesitamos que se respondan algunas preguntas básicas: ¿cuántos son los mínimos que debemos usar?, o ¿cuál es el máximo socialmente aceptado? Necesitamos una guía clara que nos ayude con este tema. Pero, sin duda, lo que podremos leer cada día, es de lo afortunados que somos por vivir en España y por disfrutar de nuestro maravilloso tiempo.

Pero este hecho destapa todo este BOOM postureil. Preparaos amigos para las fotos de gente bronceándose. Porque ¿qué es la primavera sin lucir nuestros primeros morenos? Absolutamente nada. Nos desmembramos para poder enseñar nuestra parte más negra: clavículas, brazos, torsos, favoritos entre el sector masculino; o las piernas, siempre preferidas por ellas. Piernas en el parque, piernas en la playa, piernas con zapatos o piernas descalzas… el abanico es amplio.

 

Las fotos de cañas entre amigos es un clásico a partir del comienzo de mayo. El color ámbar de la cerveza atravesada por los rayos de sol, hace al jugo de lúpulo el principal objetivo de todas las cámaras. Pero sola una caña puede quedar sosa en la foto y sabemos que siempre la intentamos poner al lado de nuestras mejores adquisiciones: nuestras gafas de sol, siempre polarizadas y con cristales de colores reflectantes; la cartera nueva, el último modelo de móvil y, si somos afortunados, las llaves de coche, que siempre dan un toque bastante importante y resultón. Pero aun así, a la cerveza hay que acompañarla de las tapas que nos pongan. Regla básica: cuántas más, mejor. Otro complemento imprescindible para estas instantáneas son los amigos. Bueno, los acompañantes.

Porque amigos o no, tienes que mostrar lo bien rodeado que estás y lo popular que eres en esta época del año. ¿No tienes tiempo para tomar unas cervezas por ellos? No pasa nada: acércate cinco minutos, hazte la foto de rigor y vuelta a casa.

no friends no problem
Lo que cuenta es que parezca que hay gente

 

Por supuesto debemos hacer mención al famoso palo para hacer selfies. Cuánto más largo sea el palo, mejor. Que se pueda ver a todo tu grupo y al de los de la mesa de al lado. Y no importa que alguien se ofrezca a haceros la foto, vosotros negaros en rotundo y mostrad con orgullo vuestro palo-selfie. Advertencia: el uso de esta herramienta te hará ganar puntos en la escala del postureo social.

Aunque también nosotros, como amantes cerveceros, tenemos lo nuestro. Amamos la cerveza entre los 5ºC o los 10ºC, aunque con que este fría, nos conformamos. Gritamos que queremos que nos la sirvan con un dedo de espuma, pero si la vemos con uno y medio, la beberemos igualmente; y defendemos con toda nuestra pasión que se sirva en copa de cristal, y nunca nunca, en vaso de tubo.

Como veis, todo el mundo peca de “posturitas”. Nosotros ya nos hemos confesado y vosotros, ¿cuál ha sido vuestro momento de postureo de este mes?

Si bebes cerveza en vaso de tubo, no molas

Vaso de tubo

Os hemos hablado en anteriores ocasiones de la importancia que hay que darle al servicio perfecto de la cerveza: temperatura, conservación, armonías… Uno de los aspectos a los que más importancia damos es al recipiente en que se sirve, y sois muchos los que nos habéis pedido explicaciones de nuestro rotundo no a la cerveza servida en vaso de tubo.

Los porqués del NO al vaso de tubo:

1. Porque tienes nariz. Y cuando inclinas el vaso para beber, la nariz queda fuera. No hueles, y no sabe igual. Otros dan en llamarle la pérdida a través del sentido olfativo de las propiedades organolépticas en el momento de la ingesta. Viene a ser lo mismo.

2. Porque tienes nariz II (el retorno). Y cuando se te está acabando la cerveza el borde opuesto a aquel por el que estás bebiendo tropieza con ella. Esto es así. Y puede llegar a crear complejos, ¡o peor! Te puede llevar a forzar unos morritos dignos de una adolescente recién llegada a Tuenti. Ya está, tienes nariz, asúmelo. Y puestos a elegir entre tu nariz y la posibilidad de cambiar de vaso, te recomendamos encarecidamente la opción b.

3. Porque emites calor (esperamos. Si no lo haces, tenemos un problema). Y el calor de tu mano al agarrar el vaso hace efecto estufita con la cerveza. Otros dan en llamarle aumento de la temperatura idónea tras el servicio por efecto de la transferencia de calor por conducción. Pues eso, que calientas la cerveza.

4. Porque resbala. La superficie es cilíndrica, alargada y lisa. Nada ergonómica. Y el coeficiente de rozamiento del cristal no llega al 0,3 (Wikipedia, te debo una) ¡Resbala! Y luego te viene el listo de turno y te dice que el truco es dejar el meñique por debajo del vaso para que no se caiga. ¿Pero qué necesidad? ¿Qué necesidad? Es como tomar sopa en plato plano o servirte un filete en un cuenco. ¡No te dejes engañar!

5. Ojo al dato que viene un argumento de autoridad. Porque lo dicen Chicote y J. C. Capel. ¡Retuitearon nuestra campaña en su twitter! Y, como todos sabéis, si retuiteas algo es porque te ha llegado profundamente a la patata (que para algo son gurús de la gastronomía).

pirámide de maslow cervecera

6. Porque no mola. El vaso de tubo no mola. Y punto. Podríamos darte 1.000 motivos más: que la cerveza en el momento de ser servida no rompe igual, que la espuma no puede mantener los aromas y el sabor, que entorpece la oxigenación del líquido y el desarrollo del carbónico… pero este motivo gana a todos: no mola. Somos seres sociales y el reconocimiento forma parte de nuestro anhelo diario. Y si vas por la vida bebiendo cerveza en vaso de tubo tus cogéneres pensarán que no tienes nariz, que no emites calor, que tomas sopa en plato plano o, en general, que no molas. En tu mano está evitarlo.

Y hasta aquí nuestra sesuda reflexión de hoy. Esperamos haberos convencido y confiamos en que estas herramientas os sean útiles cuando tengáis que defender en un bar que no os sirvan la cerveza en vaso de tubo. Os recomendamos un firme: NO MOLAS. Aprovechamos para agradecer vuestros comentarios y dudas, ¡nos encanta estar en contacto con vosotros! Al fin y al cabo, hay algo muy grande que nos une… la pasión por la cerveza, siempre perfecta

No al vaso de tubo. Pide tu cerveza PERFECTAmente servida

En anteriores ocasiones os hemos hablado sobre la importancia del servicio perfecto de la cerveza. Con la guía de “Cervezas Perfectas”, disponible en nuestra web, inauguramos  hace un mes el verano hablando del ritual del servicio en hostelería de “nuestra dorada favorita”: temperatura idónea de servicio, variedades, posibles maridajes… y recipientes recomendados. Y precisamente de la importancia del recipiente en el que se sirve la cerveza vamos a hablar hoy.

 

 

El recipiente perfecto para servir una cerveza es una copa o vaso de cristal. El exterior, no nos engañemos, importa, y el cristal nos permite ver el color y el brillo de la cerveza. Los recipientes de mayor grosor impiden apreciar la bebida en su plenitud y pueden resultar menos agradables a la hora de disfrutarla.

La abertura de la copa favorece el desarrollo del carbónico, la conservación de los aromas y la oxigenación del líquido. Además, las copas pueden agarrarse por la caña, evitando que se caliente la bebida.

Cerveza perfecta
Una copa de cerveza perfectamente servida

¡Pero esta copa no es obligatoria! Normalmente las cervezas más ligeras se sirven en recipientes más estrechos para que el carbónico tenga un desarrollo más ligero y se conserven mejor los aromas. A medida que la cerveza gana tueste, cuerpo o graduación, requiere recipientes de mayor embocadura en los que el líquido se oxigene mejor y se desarrolle todo el potencial aromático de las cervezas.

Nadie conoce mejor su producto que el propio maestro cervecero, así que las recomendaciones de cada marca a la hora de elegir el recipiente deben ser las primeras a tener en cuenta (la mayoría de ellas, además, tienen su propia vajilla diseñada especialmente para sus cervezas).

El recipiente, importa. Porque cuando de disfrutar se trata, no debes privar a ninguno de tus cinco sentidos. Que tus ojos vean el dorado, que tu olfato distinga los aromas y que tu gusto… ¡que sea siempre de tu gusto!

Cervezas Perfectas con… Diego Cabrera

No hay nada más apetecible en esta época de calor que una cerveza bien fría en una terraza, por eso la semana pasada inauguramos el verano disfrutando de unas cervezas perfectas con Diego Cabrera. Este reconocido coctelero nos demostró cómo se sirve una cerveza perfecta en hostelería y nos explicó por qué es tan importante que los profesionales cuiden el ritual de servicio de esta bebida. Además, disfrutamos de algunos de los mejores platos de la carta de su restaurante en armonía con diferentes variedades de cerveza y, como guinda final, nos sorprendió con un cóctel elaborado con cerveza.

Guía cervezas perfectas

La sesión empezó recordando algunos aspectos esenciales: el servicio de caña y botella, la presentación en barra y en mesa, la adecuada conservación de esta bebida y el proceso de elaboración de este producto, desde los campos de cebadas hasta el local de hostelería.

Diego Cabrera continuó destacando la amplia variedad de cervezas que se elaboran en España y las mejores armonías con esta bebida de la mano de la guía Cervezas Perfectas, un manual para profesionales del sector sobre el perfecto servicio de la cerveza. Seáis profesionales de la hostelería o no, como buenos amantes de esta bebida, os sugerimos echar un ojo a esta guía que está ilustrada por Pepe Medina. Disponible en nuestra web.

Lager Pilsen con gazpacho de remolacha con boquerones; Lager especial con  sushi-makis variados; Lager extra con tosta de tartar solomillo de buey; Cerveza de trigo con pirulí de pintada y salsa de Reineta; Cerveza de abadía con risotto de setas al parmesano y Stout negra con trufa negra. Y como colofón un cóctel preparado con Lager Pilsen, frutos rojos y fruta de la pasión.

Aquí os dejamos un vídeo y varias fotos de la sesión. ¡Esperamos que os guste!

Coleccionismo cervecero (III)

Grifos

Siempre decimos que para disfrutar de una cerveza perfecta es fundamental elegir el recipiente adecuado. Y es que el recipiente sí importa. Por eso queremos cerrar esta serie de coleccionismo cervecero hablando de ellos, los recipientes.

El recipiente sí importa

Vaso

A pesar de que siempre insistimos en que la cerveza se debe servir en un recipiente de cristal fino

porque permite percibir mejor el brillo y el sabor de la cerveza, y que hay que huir de las jarras de cristal o cerámica gruesas, las jarras son unos de los objetos más codiciados entre los coleccionistas cerveceros.
También hay recipientes de vidrio muy populares. En España los más habituales son el vaso de globo y el vaso medio de boca ancha, además de las jarras. Dada la escasa variedad de formatos, la principal diferencia radica en el serigrafiado, que normalmente reproduce la marca de cerveza o en series limitadas que las distintas cerveceras comercializan coincidiendo con el lanzamiento de una nueva marca o la conmemoración de un aniversario.
Además de los recipientes, aunque menos populares, encontramos otra pieza fundamental del coleccionismo cervecero, los grifos. Sin ellos no sería posible disfrutar de una caña de barril. Esa caña bien tirada, fresca, con su dedo de espuma… ¡y ese primer sorbo de cerveza que es uno de los pequeños grandes placeres que alegra nuestro día a día!

Grifos cerveceros

Actualmente la mayoría de los grifos son metálicos, aunque en alguna cervecería todavía se pueden encontrar los grifos de cerámica. Los de madera, muy comunes cuando comenzó a comercializarse la cerveza en barril, ya son casi exclusivos de algunas colecciones. Y del mismo modo que con los recipientes, la principal diferencia entre los grifos radica en la marca de cerveza impresa en estas piezas.
Para terminar os dejamos con una selección de algunas de las piezas más apreciadas por los coleccionistas cerveceros. Si queréis saber más, os animamos a sumergiros entre las páginas de ‘El libro de oro de la cerveza’ (Ed. Turner).

¿Has oído hablar de las #cervezasperfectas?

Existe una cerveza perfecta para cada momento y cada persona.

El amplio abanico de variedades de cerveza ofrece multitud de matices y posibilidades para degustar con todo tipo de platos, por eso siempre decimos que esta bebida tiene mucho que aportar en cualquier momento gastronómico.
Sin embargo, no siempre se cuida su servicio como se merece. Por ejemplo, ¿sabías que la cerveza debe servirse en una copa de cristal fino?, ¿sabías que la copa debe estar fría pero nunca congelada porque apaga el sabor de la cerveza y afecta a la formación de la espuma?

¿Sabes reconocer cuando en un local de hostelería te sirven una cerveza perfecta?

Si todavía no sabes de qué hablamos, aquí tienes algunas pistas para aprender a reconocer las #cervezasperfectas.

1. El recipiente sí importa
El recipiente perfecto para servir una cerveza es el de cristal fino. Con el cristal se percibe mejor el color y el brillo de la cerveza y se suele huir de los recipientes de mayor grosor porque impiden apreciar cualquier bebida en su plenitud. En el caso de las copas, encontramos otra ventaja porque el agarre por la caña evita que la cerveza no gane temperatura y se caliente.

2. El servicio de la cerveza paso a paso
Los recipientes deben estar fríos pero nunca escarchados o congelados porque el frío excesivo modifica el sabor y aroma de la cerveza e impide la formación de la espuma.
Es aconsejable humedecer el recipiente para eliminar posibles restos de detergente o abrillantador y favorecer que la cerveza resbale por el interior evitando que el líquido explosione contra el cristal y pierda parte del carbónico.
Situar la copa o vaso bajo el caño con una inclinación de 45 grados para que la cerveza se bata suavemente con el fondo y permita la formación de espuma.
La cerveza debe resbalar por el interior del recipiente sin provocar espuma y cuando se haya llenado el vaso en sus ¾ partes se endereza hasta que se queden unos 2 centímetros para llegar al borde, entonces se corta el grifo.
Si se desea obtener una cerveza con espuma de aspecto compacto, este procedimiento se debe hacer en varios tirajes, dejando reposar el líquido entre ellos.

3. La cerveza, ¡bien fresquita!
En España solemos tomar la cerveza bien fresca. La temperatura de servicio recomendada puede oscilar entre los 5-10 grados, dependiendo del tipo de cerveza (más fría para las cervezas más ligeras y sin alcohol y más templada para las cervezas de mayor cuerpo).

4. Mejor con espuma
La espuma mantiene los aromas y el sabor de la cerveza y permite una liberación del carbónico más lenta. Se recomienda servir la cerveza siempre con espuma, preferiblemente de un mínimo de 1,5 centímetros de grosor.

En este vídeo podrás encontrar muchas #cervezasperfectas:

Perfect Serve de la cerveza. Presentaciones y maridajes (II)

Continuamos recordando la sesión Perfect Serve de la cerveza del pasado día 20/06/2012 con Paco Patón, jefe de restauración Derby hoteles en Madrid.

Si en la primera parte de la exposición pasamos por la historia y la elaboración hasta llegar a la cerveza perfecta, la segunda tuvo un cariz mucho más práctico.

Paco Patón nos propuso algunas presentaciones; formas más creativas de servir la cerveza de manera que se acentúen algunas notas pero sin llegar a desvirtuarla, añadiendo un toque más sofisticado:

  • Cerveza SIN alcohol con lima
  • Lager especial con brocheta de frutos rojos
  • Lager extra con cereza o melocotón
  • Cerveza de trigo con perlas de melón y sandía
  • Cerveza de abadía con manzana Granny Smith
  • Stout negra con mango.

Ya en la terraza del Hotel Urban, llegamos al momento de los maridajes. Pudimos comprobar que la cerveza «se comporta muy bien con casi todos los alimentos, especialmente con verduras amargas, tomate, embutidos cocidos y todo lo que lleva
vinagre», como comentaba Paco Patón.

Entre las propuestas de Paco Patón se encontraban el gazpacho verde marino o brocheta de tomate cherry con mozarella y albahaca para la cerveza SIN alcohol; ceviche de salmón con aguacate o shusis y makis variados para la lager especial; cerveza lager extra y tataki de solomillo ibérico con mostaza o embutidos catalanes; cerveza de trigo con espárragos con jamón o pincho tropical con gambas; cerveza de Abadía con Chupa-Chups de sobrasada o papas con mojo picón; para terminar con trufas de chocolate negro y brownie con cerveza stout negra.

La sesión también ha servido para recordar la gran variedad de cervezas que se elaboran en España y que dentro de ese amplio abanico se encuentra la cerveza adecuada para cada ocasión, cada persona, cada estado de ánimo y cada bocado.

Eso sí, en todas las variantes siempre recomendamos el consumo responsable, la cerveza SIN alcohol es una opción deliciosa y saludable en muchas situaciones.

Esperamos que estos consejos nos ayuden a disfrutar nuestra cerveza con la mejor presentación posible y a divertirnos descubriendo diferentes combinaciones entre cervezas y alimentos, ¡eso también es cervecear!