¿Cuánto sabes sobre las cervezas lambic?

¿Has oído hablar alguna vez de las cervezas Lambic? Se trata de una de las más desconocidas dentro de este mundo, así que en este post te contaremos todas sus peculiaridades, desde su origen hasta su composición y resto de características.

A pesar de no ser de las cervezas más populares, esta variante cuenta con una tradición de más de 400 años y no es apta para principiantes. Se elabora exclusivamente al sureste de Bruselas, más concretamente en el valle del Senne. El que sólo se elabore allí, se debe a que las levaduras y bacterias de este valle hacen a las cervezas Lambic únicas en el mundo.

En cuanto a su composición, las lambic propiamente dichas están hechas de trigo (30%) y cebada (70%). El porcentaje de alcohol en este estilo de cervezas va, por lo general, de 4% a 6%. Se constituye como una cerveza seca y con muy poco gas carbónico.

Cómo se elaboran las cervezas Lambic

A diferencia del resto de cervezas, las lambic se hacen sin añadir levadura de cultivo, son las propias levaduras y bacterias del ambiente las que hacen que el mosto fermente. Se trata por tanto de una cerveza de fermentación espontánea. Esta fermentación las convierte en unas de las cervezas más inusuales del mundo, ya que durante este proceso no se añade levadura, sino que se deja actuar a las levaduras salvajes del ambiente de la zona de donde proceden ¿sabías que este proceso de elaboración puede llegar a durar varios años?

Requiriéndose lúpulos muy viejos para su elaboración, la mayor parte de la cerveza lambic se utiliza para mezclar y refermentar añadiendo frutas y es dificil de conseguir tal cual, sin mezclar, fuera de su zona de origen. En la fermentación es donde entran en juego elementos que hacen de las lambics cervezas de auténtico culto, ya que en el proceso intervienen no solo las levaduras “clásicas” que fermentan, por ejemplo, el vino, sino otros agentes que darán aromas y sabores muy peculiares que no son apreciados por todo el público.

Dicen que la cerveza Lambic la amas o la odias, pero no hay un término medio ¿cuál es tu caso?

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