Cerveceras, ha llegado vuestro día, y todas merecéis un homenaje
El 8 de marzo se celebra el Día de la Mujer. Por ello, queremos homenajear a todas las mujeres de nuestra vida que tanto han luchado por nosotros y que tanto nos aportan en nuestro día a día. Celebremos su día haciendo lo que mejor sabemos hacer, y ¿cómo celebramos nosotros todos los días importantes? ¡Efectivamente, saliendo a cervecear! Coge de la mano a todas esas mujeres importantes de tu vida y llévatelas a compartir una tarde de cañas, anécdotas y risas. Porque todas tienen un papel imprescindible en nuestras vidas y merecen saberlo.
Abuelas
Por ser las abanderadas del “te veo más delgado que la última vez” “toma esto para tomarte una cañita con los amigos y que no lo vea tu madre” (mientras te pasa la paga a escondidas) y todos esos platos de nuestra comida favorita que nos han preparado, con el único propósito de que engordásemos 5 kg de una sentada, ¡devolvámosles todo ese cariño y compartamos con ellas lo que más nos gusta hacer!
Todos nosotros tenemos un fan incondicional, y esa es nuestra abuela. Por eso, y por todas las veces que nos han mimado, se merece que te la lleves a tomar una caña junto con sus tapas favoritas. ¡Será la mujer más feliz del mundo!
Madres
Madre solo hay una y todos tenemos a la mejor. Son nuestras mayores defensoras y guerreras. Son esas mujeres que, además de haber desarrollado capacidades paranormales como el lanzamiento de zapatilla supersónico o la capacidad de encontrarlo todo a la primera (“como vaya yo y lo encuentre… “, y ¡lo encuentra! También son capaces de prepararnos tuppers a una velocidad récord y de adelantarse a todos los acontecimientos con tal de que nunca te falte de nada.
Esas mujeres a las que cada vez te pareces más y más, copiando sus manías, expresiones y maneras de hablar.
Hermana
Si has tenido la suerte de tener una hermana seguro que al mismo tiempo ha sido además tu mejor ypeor enemiga, sobre todo, cuando el armario era el campo de batalla. Habéis compartido travesuras y juegos, habéis discutido por todo lo discutible (el mando de la tele, el sitio en el coche, quién recoge la mesa…) y os habéis protegido la una a la otra (o el uno al otro) siempre que el mundo se ha puesto en vuestra contra.
Tu hermana es tu fiel compañera y por eso, merece que la homenajees llevándotela de cañas. Vete a buscarla al trabajo o a la universidad e invítala a vuestro bar favorito.
Amigas de toda la vida
Todos y todas tenemos ese pequeño grupo de amigas que siguen con nosotros después de muuuuuuchos años… Habéis compartido un montón de momentos que nunca podréis volver a compartir con nadie más: horas de parque, intercambio de bocadillos en el patio del colegio, modas ridículas (bueno, esta puede que la estéis compartiendo ahora mismo con alguien), peleas y sobre todo, muchas risas.
Porque crecer y recordar junto a un grupo de amigas es una de las mejores cosas que podemos tener, esto también se merece un homenaje.
La amiga que vive lejos
¿Quién no tiene una gran amiga que vive lejos y a la que no puede ver todo lo que le gustaría? Esa amiga que, por mucho que pase el tiempo, en cada reencuentro parece que el tiempo no haya pasado. Esta amiga también se merece que celebres el Día de la Mujer junto a ella, sobre todo, si sirve como excusa para volver a juntaros.
Buscad un hueco en la agenda, un punto intermedio de reencuentro y poneos al día junto con unas cervecitas y unas tapas. Aunque parezca que el tiempo no ha pasado desde la última vez que os visteis, ¡es el momento de organizar un reencuentro!
La compañera de trabajo
Es el día para que tu compañera de madrugones y ojeras y tú os vayáis de cañas después del trabajo. ¡Escaparos a ese bar de al lado de la ofi que tantos momentos ha vivido con vosotras y desconectad!
La amiga de la uni
Los apuntes compartidos, las miradas que lo dicen todo al dar la vuelta a un examen, las horas de cafetería, tener un sitio asignado (y fulminar con la mirada a todo aquel que osase a quitároslo), y graduaros juntas…todo eso une mucho. Por eso y por mucho más, ¡salid juntas a cervecear!
Todos tenemos en nuestra vida un montón de mujeres sin las que nuestro día a día no sería el mismo, por todas ellas ¡chin, chin!