Cómo sacar partido a estas mini vacaciones de Semana Santa (y no fallar en el intento)

Reconócelo: en muy pocos días vas a desconectar tu alarma. Por un corto periodo de tiempo, se acabó madrugar para ir al trabajo… y es que retozar unos cuantos minutos más en la cama se convertirá en toda una obligación moral durante tus vacaciones de Semana Santa. Estos días libres tienen un carácter especial, pues al fin y al cabo, no son tantos como para emprender largos viajes que te dejen agotado ni tan pocos como para no poder aprovecharlos al máximo. No te equivoques: esta Semana Santa es para descansar, para dedicar un poco de tiempo a ti mismo… y lo más importante, para compartirlas con los tuyos.

Ni se te ocurra planificar una gran expedición, si no quieres dejarla a medias. Estas vacaciones son de escapada a la montaña. De huir a la playa. De visita express al pueblo (piensa en todos esos tuppers que traerás de vuelta, los necesitas). De reservar cena en un restaurante. De saltar y gritar hasta quedar afónico en un concierto.  De visitar un balneario. Y lo que es más importante: estas vacaciones, amigo cervecero, son del “bar de la esquina”.

¿Cuántas noches te has sentido culpable por prolongar tus cenas y quedadas en el bar por el simple hecho de tener que trabajar al día siguiente? Ahora serás el gran maestro de ceremonias de tus bares de confianza, artífices de risas, de cientos de anécdotas y de miles de cotilleos que llevabas semanas sin poder contar. Es hora de ponerte al día, y además, poder regodearte en los detalles, sin prisas… Solo piensa que al día siguiente no tendrás que entregar ese informe o llegar a tiempo a la reunión de las 10:00 del próximo jueves. De hecho, esa reunión tendrá lugar en tu colchón y tu almohada será el único compañero de trabajo.

TorrijasAdemás, ¿has pensado en la gran oferta gastronómica que tienes por delante esta Semana Santa? Estas vacaciones no están pensadas para comer rápido y mal, sino más bien para organizar grandes comidas familiares, elaboradas cenas entre amigos y muchos, muchos, muchísimos postres. Lo has adivinado: la torrija, un año más, vuelve a nuestras vidas. Fiel a la cita, tendrás amigos que te fallarán estas vacaciones de Semana Santa. Pero puedes estar seguro de que la torrija nunca lo hará. Además, como buen cervecero, sabrás que este postre marida a la perfección con cerveza negra. Verás las estrellas con la experiencia gastronómica que supone esta combinación dado su gusto a regaliz y frutos secos. Te recomendamos recurrir a una negra stout de intenso malteado. Su espuma cremosa y robusta y el aroma a café unido al del lúpulo, te sabrá a gloria esta Semana Santa.

En definitiva, amigo cervecero, el principal truco para sacar el máximo partido a estas vacaciones no es otro que ser realista. En sustituir la expedición a la India por un par de cañas en cualquier terraza. En cambiar tu bañador y bronceador de Cancún por un par de skis en la sierra más cercana. En sacar de la maleta toda tu ropa, el secador y por un saco de dormir que instalarás en aquel pequeño camping.

Recuerda que no hay planes pequeños, si no planes mal aprovechados.