¿Y qué hago yo ahora con una hora más de sol?

Reconócelo: con las horas de sol, los españoles, nos quejamos de vicio. No es necesario viajar muy lejos para ser conscientes de que los españoles somos unos afortunados en materia “solear”, y sin embargo, ponemos el grito en el cielo cuando anochece a las seis de la tarde en invierno o se nubla un poco la mañana durante la semana.

Este cambio de hora que se inició la madrugada del domingo pasado a las 2:00 (perdón, a las 3:00) nos traerá nada más y nada menos que 135 horas más de luz al año. Y habrá que aprovecharlas, ¿no?

Sin embargo: ¿qué hago yo ahora con una hora más de sol? Puesto que despertarse una hora antes tampoco es del agrado de nadie, hoy te traemos una serie de ventajas (muy en nuestra línea) para poder afrontar esta semana, en la que irremediablemente dormirás una hora menos. Porque, como suele decirse en estos casos, siempre es mejor mirar la caña de cerveza medio llena. Era así, ¿no?

  • La posibilidad de volver a tu infancia: todos tenemos un pequeño Peter Pan que de vez en cuando nos empuja a volver a los parques y disfrutar del sol primaveral al aire libre con nuestros amigos. Dale una tregua al mundo de los adultos y de las obligaciones para mancharte de barro y saltar en todos los charcos. En el fondo lo estás deseando. Pero sin pasarse:

  • Sales del trabajo y… ¡milagro!: Sigue siendo de día. Se acabó aquello de entrar y salir de la oficina como si vivieras en Stavanger, Noruega. La noche no te alcanzará en tu interminable jornada de trabajo, y de repente, comprobarás que tienes todo el día por delante para hacer de todo. Además, querrás acabar lo antes posible con todas tus tareas e incluso serás más productivo. ¡Son todo ventajas!

  • Ver más a menudo a tus familiares y amigos: el “perdona, es que se me ha hecho tarde” ya no es excusa… ¡mira que solazo hace ahí fuera, no es tarde en absoluto! Tienes una hora más de sol para salir a la calle y disfrutar de la “sugerencia de la casa”: compartir con tus seres queridos una terraza al sol que más calienta, que no es otro que el brillo dorado de una cerveza bien fría.

  • Invitar a esa ronda: si haces caso a nuestra sugerencia cervecera con tus amigos, tendrás el dilema de pagar la cuenta (las terrazas no se ponen solas y nuestro hostelero se merece siempre la mejor propina) que sobre todo, a un par de días de terminar el mes, vaciar la cartera cuesta bastante… a no ser que tengas en cuenta lo siguiente: el cambio de hora, además de traernos una hora más de sol, ¡nos aporta un ahorro económico/energético de 6 euros! Que si bien no es demasiado… termina siendo un par de rondas acompañados por amigos en la mayoría de nuestros bares. Y eso, amigo cervecero, sí que es mucho

Y es que muchas veces nos obcecamos en no ver más allá de lo negativo, cuando la mayoría de las veces todo cambio trae consigo algo positivo. Incluso el de hora. Solo hay que ser creativos. Porque ya lo decía la canción: Always look on the bright side of life